El ahorro en energía y consumo es un tema que adquiere cada vez más importancia a nivel empresarial. No sólo por la responsabilidad medioambiental, sino también por las normativas que se han impuesto, y se seguirán imponiendo, en este sentido.
Una de las maneras de ahorrar y ser más responsable con el medioambiente es la instalación de placas solares. Gracias a esto tu empresa conseguiría un doble objetivo: ofrecer una imagen de futuro y responsabilidad a tus clientes y mejorar las cuentas de tu negocio.
El autoconsumo industrial: una apuesta de futuro
Cada vez es más común en las empresas españolas la instalación de una cubierta fotovoltaica. Esto consiste en un amplio número de placas solares que le proporcionan a la empresa parte o toda la energía que necesita diariamente.
Una de las mayores ventajas de este tipo de instalaciones es que nos permite decidir de manera directa y personal sobre la producción y el consumo energético que se realiza. Además, se puede decidir almacenar el excedente de energía o bien volcarlo en la red de distribución.
Además, la instalación de placas solares en tu negocio lo revalorizará.
Una instalación rápida, económica y asesorada
Si bien hace años este tipo de instalaciones era mucho más cara, por suerte, el precio de los paneles solares ha descendido en un 80%.
Por esto, cada vez más compañías dan el paso a su instalación, la cual, además, es muy sencilla debido a que la técnica ha sufrido grandes avances así como el aumento de la demanda ha repercutido de manera positiva en los precios de materiales, trabajos de colocación, etc.
Saber si tenemos una idea correcta sobre el lugar concreto donde la instalación sería efectiva y rentable es muy complicado por lo que lo mejor es contactar con una empresa especializada en este tipo de trabajos para que realicen un estudio de viabilidad y puedan asesorarnos sobre los resultados a obtener.
Ventajas del autoconsumo fotovoltaico
Debido al incremento del precio de la energía de los últimos años así como el abaratamiento de los paneles y componentes solares (que en sólo un año se han abaratado en un 20%), la instalación fotovoltaica es ya una inversión necesaria si buscas la reducción en el gasto en energía.
Además, el autoconsumo le da al consumidor el poder de decidir y controlar la producción y el consumo de energía. También posibilita el doble beneficio al poder vender el excedente de energía.
Gracias a una instalación de autoconsumo, tu empresa podrá abaratar los costes entre un 40-60%, en función del tipo de actividad que se lleve a cabo. El ahorro que permite el autoconsumo proviene de que la energía que produce el sistema es totalmente gratuita. Las instalaciones de autoconsumo total dotan al inmueble del 100% de la energía que necesita.
Cuanto mayor sea el precio que el cliente paga por la energía, más rentable será la instalación fotovoltaica. Esta tiene un coste de inversión fijo inicial, pero los gastos de operación y mantenimiento a lo largo de su vida son muy bajos.
Mucha gente se preocupa por si una instalación de este tipo (por mucho que hayan bajado los precios sigue siendo una instalación cara) es realmente rentable. Gracias al ahorro que proporcionan, las instalaciones de energía solar fotovoltaica se amortizan en unos 5 a 7 años. A partir de este momento, el ahorro será total.
Para que tu instalación sea correcta, la empresa instaladora debe conocer los datos de tu consumo. No sólo cuánto se consumen mensualmente, sino también los horarios de consumo, para saber, por ejemplo, si se necesitarán o no baterías.